Cuando una persona cercana sufre incontinencia urinaria por el motivo inicial que sea, debemos saber qué medidas tomar para poder ayudarle si lo precisa.
Lo primero de todo es conocer cuál ha sido la causa que provoca la incontinencia urinaria para así saber cómo tratarla o controlarla. Acudir al médico nos ayudará a identificarla.
Modo de actuación: la cita médica, primordial
Si detectamos una posible incontinencia resulta primordial acudir al médico de cabecera para detectar el origen y de este modo definir su diagnóstico. La incontinencia urinaria es la consecuencia de una enfermedad y no una enfermedad en sí misma, es un síntoma. La señal más evidente seria la demostración objetiva de la pérdida de orina.
La incontinencia de orina puede ser de urgencia, de esfuerzo, por rebosamiento, funcional o neurológica. También puede estar relacionada a una enfermedad como por ejemplo el Alzheimer, la diabetes y el cáncer de próstata. De esta manera, es importante establecer la causa para poder actuar adecuadamente.
También pueden existir factores de riesgo como el fumar o consumir alcohol a menudo, que podrían derivar en incontinencia relacionada con la vejiga hiperactiva. El sobrepeso, la tos crónica y el estreñimiento podrían debilitar la musculatura del suelo pélvico relacionada con la micción e incontinencia de esfuerzo.
Por tanto, los análisis de sangre y orina, pruebas de diagnóstico o la exploración física son claves en este punto. También para que podamos descartar un problema de fondo más grave.
A partir de los resultados, deberemos seguir las pautas médicas. Según la causa y la gravedad, controlaremos los factores de riesgo y si el médico lo valora reduciremos o eliminaremos el consumo de ciertos alimentos, bebidas e incluso medicamentos que podrían tener efectos diuréticos ya que incrementan el volumen de orina.
Consejos para el familiar que precisa ayuda
La incontinencia urinaria es frecuente en edades avanzadas. Para lidiar mejor con ello, además de mantener una actitud adecuada, debemos insistir en que la persona con incontinencia mantenga unos hábitos de higiene adecuados como hidratar y limpiar correctamente la zona genital; así como cambiar los pañales con relativa frecuencia. También podemos recomendar hacer ejercicios para fortalecer el piso pélvico junto a una dieta saludable y beber 1,5 a 2 litros de agua diarios.
Por lo tanto, obtener un buen diagnóstico es esencial para que la persona con incontinencia pueda mantener su estilo y calidad de vida.